domingo, 4 de agosto de 2013

Italia fue el primer pais en poner en circulacion una moneda bimetalica

El primer país emisor de moneda bimetálica circulante a nivel mundial fue Italia. En 1982, la Ceca de Roma, Istituto Poligrafico e Zecca dello Stato, sorprendió al mundo con una moneda de 500 Liras muy particular. Ésta consistía en una circunferencia de latón inscrita dentro de un anillo de acero inoxidable. San Marino y Vaticano, que compartían sistema monetario, siguieron la estela de Italia y emitieron sus 500 Liras también en formato bimetálico.
Años más tarde, en 1987, Marruecos emitió con cospeles de la moneda de 500 Liras sus nuevas monedas de 5 Dirhams y un año más tarde Francia y Mónaco, con sus moneda de 10 Francos y Tailandia, con su moneda de 10 Baht, siguieron el ejemplo de Italia.
En 1992, la Monnaie de Paris saltó a primera plana de la numismática internacional presentando un nuevo tipo de moneda bimetálica. La nueva moneda de 20 Francos estaba formada por tres aros concéntricos en lugar de dos, un centro de latón con una corona de níquel inscrita en un anillo de latón, esta moneda fue conocida mundialmente como Moneda Trimetálica.
Desde entonces, numerosos países del mundo han emitido monedas bimetálicas para su circulación y uso corrientes. Para este uso, las tonalidades metálicas más usadas son las combinaciones de metales dorados con plateados. Existen también otras combinaciones posibles pero poco comunes: la moneda de 50 Coronas de la República Checa combina el cobre en su anillo y el dorado en el centro; los 2 Naira de Nigeria usan el cobre en el anillo y níquel en el centro; y la moneda de 10 dinares de Argelia utiliza dos metales del mismo color gris pero de distinta tonalidad: acero en el anillo y aluminio en el centro.
Otros países han usado este formato bimetálico para realizar monedas commemorativas de un nivel y calidad apreciados por todos los coleccionistas numismáticos. Estas monedas se fabrican combinando metales preciosos como el Oro o la Plata o alterándose con éstos otros más innovadores como el Niobio, el Titanio o el Tántalo.